sábado, abril 05, 2008

Ira

Hay dias en los que las circunstancias se juntan oprimiendote contra las paredes de los segundos hasta que te exprimen hasta la última gota de alegría, dejandote como cascarón vacio al antojo de los caprichos de aquellos que tienes más cerca. Hoy es uno de esos dias, hoy odié cada fracción de mi ser por ser cobarde, por haberme perdido el respeto, por no encontrarme ni en mi sombra, por bloquear en mis labios el grito de mi alma encerrada. No se en que punto me olvidé de mi mismo, y ahora me importa una mierda, el caso es que soy el recipiente rebosante de rabia, el pulmón de la ira, el aliento de la insatisfacción, de alguien que una vez fue.

Hoy vomito desprecio, inflinjo daño con cada mirada, y aprieto los puños hasta que se abran las palmas de las manos, para escribir con sangre en el libro de mi vida que este 5 no puede olvidarse.

1 comentario:

Unknown dijo...

Fue una prueba muy dura, incluso para el más valiente de los gladiadores!
Cuestionarte el ser humano que eres sólo te llevará hacia el árido camino de la soledad.
Disfruta de los pequeños instantes de miradas y sonrisas cruzadas.
Hiciste lo que tenías que hacer!