Let her down easy

Duda sobre lo que hoy colma todos y cada uno de los latidos de mi corazón, duda sobre si estaré a la altura del desafío que representa saber que con cada día que pasa sus lazos suavemente se irán deshaciendo a favor de los vientos de muchas líneas por escribir, de muchas lunas que eclipsar, de un par de lágrimas que derramar, de una vida que vivir a golpe de anhelos e ilusiones.

¿Seré capaz de poner algún cimiento en su sacudida conciencia inquieta como el mar que le da su nombre? ¿Recordará algún consejo escondido tras mis palabras cuando cada vez le vayan sonando más a las letanías de alguien que no supo vivir su vida conforme a sus principios?;¿tendré las fuerzas suficientes para dejar que sufra solo lo justo?; ¿Estaré a su lado para susurrarle que con las cosas del corazón no se juega, mientras recojo sus lágrimas cayendo como puñales en mi alma?, ¿podré guardar el secreto de que tras los golpes está la forja del carácter y que tras las caricias a veces anida la más terrible de las mentiras?, ¿Estaré a la altura de su primer te quiero con distinto signo?...

Dudas que se alejan a medida que la noche se cierra y yo no puedo apartar los ojos de mi tesorito, mientras se acerca a eso que llamamos vida,hoy de forma tan plácida como su sueño, y me reconforta la idea de que aún sigo siendo el héroe de sus pequeñas historias de príncipes y princesas, de finales felices y días largos como serpientes.

Sentimiento cotidiano

Una parte de mi...

...conoce tu mundo real,ese que está al otro lado del espejo en el que los sueños, los nuestros, los tan bellamente compartidos, no tienen carta de naturaleza. Ese lado en el que los besos siempre son de otro, ese en el que las quimeras se detienen a golpe de mando a distancia, ese en el que yo siempre no existo más allá de un nombre que rara vez se repite y en el que vivo en una permanente encrucijada de caminos marcada por senderos de lamentos y cenizas de corazones fulminados por la imposible coexistencia con mi agenda repleta de canciones con etiquetas de nombres de mujer, de besos sin factura, de silencios escondidos en las sombras.

Una parte de mi conoce tu realidad, tus momentos contigo misma, tus plegarias calladas, tus triunfos sobre los derroteros cotidianos, el calor de ese abrazo que nunca es mio y la envidia me posee, hoy como siempre de aquellos que ocuparon un lugar por el que me postulé aún estando siempre tan lejos.

Una parte de mi, que tampoco está, te conoce lo suficiente como para extrañarte cuando respiro, cuando sufro, cuando me escucho recordándote.

Una parte de mi te ansía y se resigna a vivir en ese lado del espejo donde todo es posible menos aquello que vive allí donde un nosotros no pudo ser.